Para la mayoría de los niños, ser hombre o mujer es algo que se siente muy natural. Cuando nace un bebé se le asigna el género de acuerdo con sus características físicas, ya sea masculino o femenino. Esto se refiere al exclusivamente al «sexo» o al «género asignado» del niño. En cambio, la «identidad de género» se refiere a la experiencia personal que tiene una persona de ser hombre, mujer o de ser diferente; la expresión del género se refiere al modo en que cada persona siente su cuerpo desde la experiencia personal y de cómo comunica esa identidad de género a otras personas a través de conductas como su manera de vestir, su apariencia personal, su voz o algunas características corporales.

El reconocimiento propio de la identidad de género se desarrolla con el tiempo, de manera muy similar al desarrollo físico que tiene un niño. En la mayoría de los infantes, la identidad de género coincide con su género asignado (sexo). No obstante, en algunos niños, la correspondencia entre el género asignado y la identidad de género no es tan clara.

La identidad de género suele desarrollarse en varias etapas: alrededor de los dos años los niños ya toman conciencia de las diferencias físicas entre varones y mujeres y antes del tercer año la mayoría de los niños se pueden identificar con facilidad como hombres o mujeres.

A los cuatro años la mayoría de los niños tienen un sentido estable de su identidad de género y durante esta misma época de la vida, los niños aprenden conductas del rol de género, es decir, «cosas que hacen los varones» o «cosas que hacen las mujeres».

Además de los juguetes, juegos y deportes que eligen, los niños suelen expresar su identidad de género de varias maneras: a través de la vestimenta o el peinado, los modales, los estilos de conducta, los gestos físicos y otras acciones no verbales identificadas como masculinas o femeninas.

La construcción de la identidad de género, es decir, la identidad que recoge los imperativos sobre el ser hombre o mujer, es un proceso complejo que involucra factores biológicos, sociales, culturales y psicológicos de la persona y en ellos también influye el entorno, los referentes, las experiencias pasadas, las vivencias actuales, la personalidad y los gustos e inquietudes.

Existen varios tipos de identidad sexual, entre ellos:

Andrógino: Persona biológicamente hombre que tiene rasgos corporales ambiguos y que no se corresponden a los de su verdadero sexo.

Andrógina: Persona biológicamente mujer que tiene rasgos corporales ambiguos y que no se corresponden a los de su verdadero sexo.

Asexual: Persona que no se siente atraída sexualmente por otras personas. Se apartan de la sexualidad y construyen otro tipo de vínculos afectivos, emocionales y de amor con quien así lo deseen.

Bigénero: Son personas que expresan su identidad de género de forma tanto masculina como femenina, al mismo tiempo o de forma variada.

Bisexual: Es la persona que tiene preferencia por igual por ambos sexos.

Cisgénero: Se trata de aquella persona cuya identidad de género corresponde al sexo asignado al nacer.

Cross Dresser: Hombre que se viste de mujer independientemente de si es gay o no.

Demigénero: Cuando la persona solo se identifica parcialmente con un género.

Dos espíritus: Se caracteriza porque la persona se puede identificar con ambos roles, el masculino y el femenino.

Gay: Un hombre al que le gustan exclusivamente otros hombres.

Género fluido: Cuando la identidad de género no es fija ni definible sino más bien cambiante. Se pueden sentir como hombre un tiempo y después como mujer o viceversa.

Género neutro: También se le conoce como tercer sexo o agénero. Es cuando la persona no se siente identificada ni con su género biológico, ni con el opuesto a ese. Ni masculino, ni femenino.

Género no conforme: Se refiere a las personas cuyo género sentido no coincide con su género asignado al nacer.

Heterosexual: Cuando se tiene preferencia exclusiva por personas del sexo opuesto.

Heteroflexible: Se trata de una persona que, aunque habitualmente es ‘hetero’, puede sentir también atracción por alguien de su propio sexo.

Homoflexible: Es una persona que, aunque habitualmente es ‘homosexual’, puede eventualmente sentir también atracción por alguien del sexo opuesto.

Homosexual: Son quienes tienen preferencia exclusiva por otras personas del mismo sexo.

Intersexual: las persona que nacen con órganos reproductivos o sexuales que no se ajustan a lo que tradicionalmente se considera “masculino” o “femenino”.

Lesbiana: Una mujer a la que le suelen gustar exclusivamente otras mujeres.

Pansexual: Se trata de alguien a quien le atrae todo tipo de personas, de cualquier sexo y de cualquier género. Se sienten atraídas física, afectiva y emocionalmente hacia otras personas sin importar su sexo o identidad de género.

Pangénero: Persona que siente diversas identidades y se identifica con ellas de forma permanente, simultánea y fija en el tiempo.

Questioning o en duda: Es cuando la persona tiene dudas de su género.

Queer: Cuando no es ni heterosexual, ni cisgénero, es un término amplio donde caben muchas identidades que no necesariamente tienen una etiqueta fija.

Sapiosexual: Es la persona a la que le atrae la inteligencia de las personas.

Transexual: Una persona cuya identidad no se corresponde con su sexo. Abarca a todas las personas transgénero, transexuales o de género fluido.

Variante: También se conoce como genero expansivo. En general, no cumple las expectativas sociales del género asignado.

Transgénero: Se trata de aquella persona cuya identidad de género no corresponde al sexo asignado al nacer. Estas a su vez se clasifican en:

Transexual: Generalmente son quienes no están conformes con su cuerpo y recurren a cirugías de cambio de sexo.

Transformista: Son personas que ocasionalmente asumen roles del género opuesto. Hombres que tienen conductas, atuendos y estilos femeninos, contrarios a su propio género y mujeres que disfrutan con conductas, atuendos y estilos masculinos.

Travesti: Son quienes expresan su género de manera permanente a través de la utilización de prendas de vestir social y culturalmente consideradas propias del otro género.

Drag Queen: Describe a una persona que se caracteriza y actúa a la usanza de un personaje de rasgos exagerados, con una intención primordialmente histriónica que se inspira de las nociones tradicionales de la identidad de género y los roles de género. Es una forma de personificación y transformismo en el que una persona altera su apariencia y los patrones de su personalidad para ajustarlos al comportamiento y apariencia de un personaje mediante peinados exuberantes y maquillaje.

Juan Guillermo Londoño Berrío

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